viernes, 31 de octubre de 2008

TRANSFUSIÓN O VAMPIRISMO DE CUELLO BLANCO


Te coloco más abajo un artículo que me ha parecido interesante e incluso, aunque este escrito desde la espiritualidad cristiana, trasladable a cualquier sensibilidad solidaria.
You put below an article that I have found interesting and even, but that letter from Christian spirituality, sensitivity to any removable solidarity.

G-20, LA CUMBRE DEL DIOS MAMÓN
PEPE LAGUNA, pepe.laguna@yahoo.es
PARLA (MADRID).


ECLESALIA, 30/10/08.- El presidente español Rodríguez Zapatero anda estos días pateándose medio mundo, en busca de apoyos que avalen su presencia en la cumbre que reunirá el 15 de Noviembre en Washington a los líderes de las 20 principales economías del mundo (G-20). ¡Cómo no va a estar España, octava potencia mundial, en ese encuentro! Yo echo de menos una actividad diplomática similar por parte de Benedicto XVI, no porque el Papa deba reivindicar para el Vaticano una posición privilegiada en el ranking de los países ricos, sino porque alguien debería exigir la presencia en esa cumbre de los millones de empobrecidos que constituyen la mayoría numérica del planeta. Una exigencia que la Iglesia podría/debería asumir como propia.

Si en la cumbre se van a decidir los fundamentos de un nuevo orden económico mundial, esto no puede hacerse de espaldas al sufrimiento de las tres cuartas partes de la población. No es verdad que los principales problemas de la humanidad sean el endeudamiento del Leaman Brother, el desplome de Wall Street o la bajada del IBEX. Los verdaderos problemas son la sangría de muertos en las pateras del Estrecho, el genocidio inminente en la república Democrática del Congo, o la hambruna endémica del continente africano. Aunque los informativos nos lo presenten con sordinas eufemísticas: “muertos por hipotermia”, “fallecidos por inanición”, la realidad que golpea el estómago y la conciencia es que, en el siglo XXI, hay seres humanos –especialmente niños y niñas- que mueren de hambre y frío. El problema del mundo no es que el banco Santander Central Hispano gane algo menos de los 10.000 millones de euros previstos para el 2008, sino los 13 millones de africanos amenazados por el hambre, los 200 mil niños de la calle de Brasil, los 25 millones de desplazados internos o los 10 millones de refugiados a causa de los conflictos armados.
Desde su cercanía compasiva al dolor de los excluidos, la Iglesia samaritana debería gritar su indignación a la cumbre de adoradores del becerro de oro. Alguien debería recordarles a los sumos sacerdotes del mercado, que la alteridad radical de la realidad son los pobres de este mundo por delante de cualquier otro interés.
Si la erradicación de la pobreza no es el asunto prioritario de la cacareada cumbre mundial, asistiremos a una ceremonia del culto al dios Mamón que exigirá la sangre de víctimas inocentes para seguir alimentando los graneros del rico Epulón. Ojalá la Iglesia se sienta urgida por el sufrimiento de tantos hombres y mujeres y exija su presencia profética en esa cumbre. Benedicto XVI debería comenzar ya a patearse el mundo. (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).

G-20, THE SUMMIT OF GOD Mamon
PEPE LAGUNA, pepe.laguna @ yahoo.es
PARLA (MADRID).

ECLESALIA, 30/10/08.- The Spanish president Rodriguez Zapatero walks these days pateándose half the world in search of support that guarantee their presence at the summit to meet on Nov. 15 in Washington to leaders of the 20 leading economies in the world (G-20). How will not be Spain, the eighth world power at that meeting! I miss least a similar diplomatic activity on the part of Benedict XVI, not because the pope is to claim the Vatican for a privileged position in the ranking of rich countries, but because someone should require the presence at the summit of the millions of impoverished are the numerical majority of the planet. A requirement that the Church could / should take as their own.
If the summit will decide the foundations of a new world economic order, this can not be done with his back to the suffering of three-quarters of the population. It is not true that the major problems of mankind are the indebtedness of Leaman Brother, the collapse of Wall Street or the descent of the IBEX. The real problems are killed in the bloodletting of the small boats in the Strait, the impending genocide in the Democratic Republic of Congo, or endemic famine in the African continent. While the information presented to us with mute euphemistic: "killed by hypothermia," "death by starvation," the reality that hits the stomach and is aware that in the twenty-first century, there are human beings, especially children, die hunger and cold. The problem of the world is not that the bank Santander Central Hispano won slightly less than the 10.000 billion euros projected for 2008, but the 13 million Africans threatened by famine, the 200 thousand street children in Brazil, 25 million IDP or the 10 million refugees due to armed conflict.
Since its compassionate closeness to the pain of the excluded, the Samaritan Church should shout their outrage at the summit of worshipers of the golden calf. Someone should remind the high priests of the market, which the radical otherness of reality are the poor of this world ahead of any other interest.
If the eradication of poverty is not the priority issue of the vaunted global summit, will attend a ceremony to worship the god Mamón that require the blood of innocent victims to further fuel the granaries of the rich Epulón. Hopefully the Church feels pressed by the suffering of so many men and women and require their presence at this summit prophetic. Benedict XVI should begin now to patearse the world.

1 comentario:

Unknown dijo...

Gran artículo. Mejor viñeta.
No hace falta que diga más.